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Croissants- Cruasan

Croissants- Cruasan

Hoy quiero mostraros cómo preparar croissants en casa. También denominados cruasanes, curasanes, medias lunas, cuernos…

Hablando de cuernos, pero de otro tipo, el otro día escuchando una canción en el coche alucinaba. En un acto de crueldad sin precedentes, sin tener en cuenta que iba indefensa al volante y por tanto sin posibilidad de taparme los oidos, me pusieron en la radio a Sergio Dalma… Que digo yo, que si venimos equipados para cerrar la boca, y los ojos, por qué no tendremos dispositivo para cerrar las orejas, que también sería muy útil,… pero eso es otra historia.

El caso es que el tema de la canción es pedir disculpas por una «aventurilla». Si no conocéis la canción «El jardín prohibido» no os la perdáis, es una fuente valiosísima de excusas para la infidelidad, y más. Y empieza a cantar Sergio Dalma:

«Esta tarde vengo triste y tengo que decirte
que tu mejor amiga ha estado entre mis brazos»

Vaya hombre, pobrecito… Te ha puesto los cuernos con su mejor amiga, pero está muy apenado. Sospecho que los brazos no es la única parte de su cuerpo involucrada en esto…

«sus ojos me llamaban pidiendo mis caricias
su cuerpo me rogaba que le diera vida.»

Vamos, que casi fue un acto de caridad. No entres en detalles hombre, que la vas a liar…

«…mi cuerpo fué gozo durante un minuto,
mi mente lloraba tu ausencia.»

Claro, lo típico. Si te entendemos Sergio. Tú estás con otra en la cama, pero no es lo que parece, porque la procesión va por dentro… (Me voy a abstener de opinar sobre la duración: 1 minuto)

«… yo me he dejado llevar por mi cuerpo
y me he comportado como un ser humano»

Me encanta esta excusa, porque no solo sirve para la infidelidad, sino que es aplicable a muchas situaciones de la vida, como un escape de gas indeseado. Y hombre, Sergio, ya que lo mencionas, casi mejor que te comportes como un animal. Hay algunos que son fieles y todo… Pero atentos, que ahora llega lo mejor, el culmen de la canción: la reina de las excusas!

«lo siento mucho la vida es así
no la he inventado yo»

Puede haber alguna excusa mejor? Seguro que al oír eso te perdona, Sergio, quién no lo entendería? Pruébala con tu jefe la próxima vez que llegues tarde al trabajo: lo siento jefe, la vida es así, no la he inventado yo.

Yo haría un trío: Sergio Dalma, la «amiga», y pondría a Jose Luis Perales como marido de la amiga. Ya veo a Perales preguntando: y cómo es él, y en qué lugar se enamoró de ti, pregúntale a qué dedica el tiempo libre? Ahora ya sabes a qué dedica el tiempo libre, Perales. Y deja ya de hacer tantas preguntas, que te pones más pesado que el protagonista de la peli esa… Pelma y Luis.

La canción original es de Sandro Giacobbe (1975).

Croissants- Cruasan

Croissants- Cruasan

La receta de hoy puede parecer horriblemente larga (escribirla de hecho lo ha sido) pero realmente no lleva tanto tiempo como parece. Tampoco voy a decir que no es trabajosa, pero no tanto como pensáis, y desde luego no tan difícil. Lo único que necesitáis es una ligera idea como funciona el proceso de hojaldrado, que os ayudará a entender muchos pasos de la receta. En otros tipos de bollería, la mantequilla va mezclada en la masa. En esta receta, la mantequilla (la mayor parte) va dentro de la masa pero sin mezclarse, formando láminas entre capas de masa, que son las que consiguen el hojaldrado (al evaporarse el agua de la mantequilla). Por eso es necesario que la mantequilla esté muy fría, y la masa también, para que al estirlarlas no se unan formando un todo, y la mantequilla forme láminas uniformes en toda la masa. Tampoco sería una desgracia si esto ocurriese, porque en cualquier caso tendríamos un bollo muy rico, pero ya no sería un croissant. Si habéis oido que hace falta usar la mal llamada «mantequilla para hojaldrar» desengañaos. Nada más lejos de la realidad. Es cierto que la «mantequilla» de hojaldrar es más fácil de estirar en frío, y tarda más en fundirse que la mantequilla normal, con lo cual hace más fácil el proceso de hojaldrado… pero no es más que una grasa vegetal hidrogenada nada recomendable, y cuyo sabor deja mucho que desear en comparación con la mantequilla. En esta receta, el proceso de hojaldrado de la masa está bastante simplificado al hacer el primer estirado de la mantequilla fuera de la masa, lo que facilita muchísimo el proceso. Además, al usar plásticos para estirar la masa, nos ahorramos el estar enharinando cada dos por tres, logrando unos croissants mucho más esponjosos… y encima sin manchar. Si queréis ver otra receta de croissants, podéis probar esta otra de Pierre Hermé Y ya sabéis, si no os salen los croissants con mis explicaciones… pues lo siento mucho, la vida es así, no la he inventado yo.

NOTA: la semana pasada estuve en Cadena SER, en «A vivir que son dos días» con Montserrat Domínguez y Sergi Arola, hablando sobre el brunch para el día de la madre. Podéis oir el audio aquí

Croissants- Cruasan

Croissants- Cruasan

{Croissants caseros}

Ingredientes:

    Para las esponja:

  • 100 g de leche
  • 25 g de levadura fresca de panadería (o dos sobres de la seca, también de panadería)
  • 170 g de harina de fuerza
  • Para hojaldrar:

  • 250 g de mantequilla
  • Para la masa:

  • 340 g de harina de fuerza
  • 80 ml de agua
  • 1 huevo mediano
  • 80 g de azúcar
  • 5 g de sal
  • 100 g de mantequilla
  • Para
    pincelar (antes de hornear)

  • 1 huevo
  • 1 cucharada sopera de azúcar
  • una pizca de sal
  • Para pincelar (después del horneado):

  • 30 ml de agua
  • 80 g de azúcar

Preparación:

  1. Comenzamos preparando la esponja. Para ello, deshacemos con los dedos la levadura en la harina, y mezclamos todos los ingredientes hasta formar una bola. No es necesario que quede un masa lisa y uniforme, solo formar una bola compacta
  2. Llenamos un bol con agua templada, y colocamos la bola en él (“agua templada” significa que al meter un dedo en ella no notas ni frío ni calor). Dejamos ahí la bola hasta que aumente su tamaño y flote. Suele tardar unos 15 minutos
  3. Preparamos unos plásticos grandes (yo uso carpetas del instituto a las que corto los extremos para abrirlas) que usaremos varias veces a lo largo de la receta. Colocamos el rectángulo de mantequilla para hojaldrar entre dos plásticos, o dentro de una carpetilla, y dando golpes primero, y con el rodillo después, lo estiramos hasta que tenga el tamaño de un folio. Dejamos en el frigorífico hasta que la masa esté lista
  4. Cuando esponja esté lista para usar, seguimos preparando la masa principal. Para ello, mezclamos en un bol todos los ingredientes, y añadimos la esponja que hemos preparado previamente
  5. Cuando los ingredientes estén más o menos unidos, pasamos la masa a una superficie donde amasaremos durante 10-15 minutos. Formamos una bola, y la dejamos reposar en un bol, cubierta con un trapo, de 1 a 2 horas, hasta que haya duplicado su volumen.
  6. Pasado este tiempo, ponemos la masa sobre un plástico grande (yo suelo pegar con celo dos carpetillas a la encimera, así no se mueven), y colocando otro plástico encima, la extendemos con el rodillo dándole forma rectangular (de 40 x 30 cm y un grosor de 7 mm aproximadamente) (Imagen número 1)
  7. Colocamos la mantequilla que hemos estirado previamente en el centro, dejando dos alas de masa, una a cada lado para cerrar sobre la mantequilla como un tríptico, sin que se monten. Las unimos sellando con el dedo los dos bordes. Envolvemos bien con el mismo plástico como si fuera un paquete, y llevamos al congelador durante 30 minutos.(Imagen número 2)
  8. Pasado este tiempo, colocamos la masa de nuevo entre dos plástico, y la estiramos hacia el lado de las aberturas, dejando de un grosor de 7 u 8 mm. Hacemos una vuelta doble: llevamos los bordes de la masa hacia el centro y luego doblamos por la mitad (en el perfil se ven cuatro capas). Dejamos reposar en el frigorífico envuelta en plástico un mínimo de media hora.(Imagen número 3)
  9. Pasado este tiempo, y de nuevo entre dos plásticos, estiramos nuevamente la masa hacia el lado de las aberturas y hacemos una vuelta sencilla: doblamos la masa en tres pliegues. Envolvemos en plástico y dejamos reposar en el frigorífico otra media hora como mínimo.(Imagen número 4)
  10. Sacamos del frigorífico, dividimos la masa en dos partes iguales, (guardamos una en el frigorífico) y procedemos a estirar la otra hasta obtener un grosor de aproximadamente 5 mm (estiramos nuevamente entre dos plásticos). Cortamos tiras de 21 cm de ancho y luego con un molde de cartón de 10 cm de base por 21 cm de alto, cortamos los triángulos (yo los suelo cortar más pequeños, porque solo los enrollo una vez, de unos 5x12cm). Hacemos un pequeño corte en la base de cada triángulo para abrir un poco la masa al comenzar a enrollar. No compréis un cortador de croissants, no merece la pena (el mío está enterrado debajo de las sartenes y nunca sale de ahí).
  11. Enrollamos los croissants desde la base al vértice estirando suavemente la punta para que quede bien formado. Si los queréis en forma de media luna girad los extremos hacia el interior. Vamos colocando sobre dos bandejas
    forradas con papel de hornear
  12. Dejamos reposar 2 horas en un lugar cálido, sin corrientes de aire, hasta que dupliquen su volumen.
  13. Precalentamos el horno a 170º C, pincelamos con la mezcla de huevo, azúcar y sal, y horneamos durante 10-15 minutos.
  14. Mientras preparamos el almíbar para pincelarlos al salir del horno. Basta con calentar el agua con el azúcar hasta que esté totalmente disuelto.
  15. Sacamos los croissants, los disponemos sobre una rejilla, y pincelamos con el almíbar. Dejamos enfriar.
  16. Se pueden congelar, y descongelar a temperatura ambiente, en el horno, o 30 seg en el microondas

Preparación: 60 min más levados, enfriados,…

Cocción: 15 min

Raciones:18 croissants pequeños

Valoración:  ★★★★★ 1 Valoración media 5

Croissants- Cruasan
1: Preparando la mantequilla.

Croissants- Cruasan
2: Preparando la masa

Croissants- Cruasan
3: Primera vuelta: vuelta doble.

Croissants- Cruasan
4: Segunda vuelta: vuelta simple.
 

Croissants- Cruasan

Croissants- Cruasan

Fuente/ Source: «Panadería y bollería con Thermomix», modificada